En el se plantea la cuestión de por qué decimos frases como "corres como una chica", "lanzas como una chica",...
Cuando lo vi, a mi me pareció significativa una cuestión que no he visto comentar. Decidme ¿quien es la víctima de esta frase? Si habéis dicho "las mujeres", estáis en lo correcto: Las mujeres son víctimas indirectas de esta frase.
Pero lo cierto es que hay otra víctima más directa de esta frase, aquel a quien se la dicen, que suele ser un chico que acaba de realizar una acción que no entra dentro del rol masculino que se le presupone. El motivo principal de esta frase no es desprestigiar a las mujeres, sino evitar que los hombres se salgan del rol que se les ha asignado.
Para algún chico será una simple broma tipo "eh, esta vez te ha salido mal, esfuérzate más", pero en otras situaciones es una advertencia seria del tipo: "cuidado, tu personalidad no es válida para nuestros estándares. Oculta lo que realmente sientes o te enfrentarás al rechazo de social".
Hemos asumido que la gran perjudicada por los roles de género es, y ha sido siempre, la mujer. Puede que sea cierto... o puede que sea otra manera de mantener los roles: La mujer es la débil, la perjudicada, la que debe de ser rescatada. El hombre es fuerte, el beneficiado, el que tiene el atributo deseable: El poder, y el que debe de asumir la responsabilidad de participar en el debate no por que el lo necesite, sino por que es él que puede hacerlo.
Personalmente, creo que no sería mala cosa empezar a considerar al hombre como débil también. Como forzado a asumir un rol de poder que no le corresponde. Enviamos a los hombres a morir a la guerra, y para ello necesitamos autoconvencernos de que son fuertes, cuando la única razón verdadera para ello es que no son tan importantes para la natalidad.
No pretendo minusvalorar el sufrimiento de las mujeres. Lo que digo es que ambos son importantes. Cierto que hay violaciones, maltratos y otros problemas que afectan más a la mujer, pero también hay diez veces más hombres que mujeres en prisión, y los suicidios entre hombres son tres veces mayores. Datos así podemos encontrar muchos y lo que muestran es que el hombre puede encontrarse en una situación de mayor poder, pero no de mayor felicidad.
Otro problema de la visión estándar es que "más fuerte, más rápido, más resistente,..." se considere mejor. El mundo masculino es evidentemente competitivo. Está bien que las mujeres puedan optar a él. Pero no debemos considerar la alternativa femenina como peor. No debe de ser la única opción para las mujeres, pero debe de ser una opción, tanto para ellas como para los hombres, que también lo necesitamos.
Ser débil no es malo.
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